23 marzo 2010

El Esperar en el Señor

Todos nosotros en algún momento de nuestra vida, hemos esperado por algo o para algo. Por ejemplo, cuando vamos al banco a depositar, retirar o pagar, tenemos que hacer una larga fila y esperar. Para hacer compras del mismo modo tenemos que hacer una muy larga fila y seguir esperando. Los que trabajamos en empresa privada tenemos que esperar una, dos y hasta un mes para cobrar. Aún cuando vamos a un hospital tenemos que esperar para que nos atienda, a excepción que hubiera alguna emergencia. El esperar, ya es algo normal. Sin embargo, todavía no nos acostumbramos a ello, eso lo podemos ver a diario cuando estamos esperando en un semáforo y cambia la luz a verde el chofer de atrás parece que tiene un censor automático, que hace sonar la bocina inmediatamente. Si no avanzas, empiezan las palabras soeces a salir de muchas bocas de conductores desesperados y apurados por pasar.
El Esperar en el Señor para muchos cristianos se podría comparar con nuestra vida diaria. En muchas ocasiones pasamos por momentos difíciles, le comunicamos a nuestro Dios nuestra situación y cuando no tenemos la respuesta de inmediato nos desesperamos, estamos tan cargados con el problema que no podemos esperar lo que Dios nos quiere decir, lo queremos ahora y comenzamos a tomar acción por nuestra cuenta. Eso provoca en muchas ocasiones complicar las cosas. Por eso hermano(a) hay que ser pacientes y entender que Dios tiene un propósito con tu vida. El momento es de Dios, Ėl tiene sobre todo, el control de todas las cosas. En la Biblia (Juan 5:5-8) hubo un hombre que estaba paralítico por treinta y ocho años, estaba cerca de un pozo esperando que un ángel removiera las aguas para sanarse, pero nadie lo ayudaba. Hasta que llegó Jesús y le dijo: ¿quieres ser sano?.

Espera a Jesús, que él conoce tu necesidad, no te impacientes, confía en sus promesas y podrás gozar de las bendiciones que tiene preparadas para ti. El salmo 40:1-2 nos confirma claramente cuando esperamos en él. Y nos dice: Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Cuando esperamos en el Señor, tenemos paz, porque descansamos en él y nos fortalecemos en fe. Aunque de momento no vemos lo que pedimos pero descansamos en Cristo Jesús. Hebreo 11:1 dice: Es, pues la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. No se ve todavía pero está ahí. Es cuestión de creerlo de aceptarlo. Dios te lo revelará en su momento, porque cuando pasan estas cosas estamos aprendiendo, estamos creciendo, estamos madurando.

19 febrero 2010

El Éxito

Escrito por Hno. Ubaldo Colon-Hernandez

En una encuesta que hice a un grupo de compañeros de trabajo sobre que significa para ellos el Éxito, obtuve las siguientes respuestas: El éxito para mí es lograr lo anhelado; poder terminar mis estudios universitarios; adquirir un mejor trabajo; tener dinero para gastar; triunfar en la vida. Para la gran mayoría de nosotros de una forma u otra esas respuestas podrían ser correctas. Y ¿porque no? la definición de la palabra éxito según el diccionario de la real academia española es: 1- Resultado feliz de un negocio, actuación, etc. 2- Buena aceptación que tiene alguien o algo. 3- Fin o terminación de un negocio o asunto.

Muchos cristianos podríamos actuar igual cuando pensamos en el éxito como una oportunidad de crecimiento. Soñamos tener o construir nuestras iglesias en catedrales y llenarlas de muchas personas, ver prosperar las iglesias con todos los adelantos tecnológicos para una mejor proyección del mensaje de la palabra de Dios y por supuesto un equipo bien sofisticado de sonido para que la adoración a Dios se escuche más agradable. Por supuesto un equipo que tenga tantos botones, aunque apenas se use el diez o el quince por ciento de ellos, pero de todos modos lucirá muy bien esa consola.

No quiero criticar para nada esos sueños, al contrario, desearía que todas las iglesias pudieran tenerlos. Pero por favor lean detenidamente este ejemplo: 11 Este relato fue narrado por el DR. Iván Álvarez Acosta, Psicólogo Clínico

A un hombre que pasaba por una ciudad sin muchas leyes favorables para él, se le acusó de alteración a la paz, se le acusaba también de engañar a los ciudadanos por los comentarios que decía y por quitarle el sustento a unos comerciantes. El hombre fue encarcelado y como no había mucha ley en el pueblo, los alguaciles lo torturaron pegándole en el rostro, azotándole y rasgándole toda la ropa en una forma despiadada. Luego fue llevado a la parte más obscura, mal oliente y tenebrosa de la cárcel. Esto, ¿ es éxito? Pienso que podría escandalizar a muchos con esta pregunta. Pero, la Biblia nos dice en Hechos de los Apóstoles capítulo 16.versículo 16-24: Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. 17 Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. 18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora. 19 Pero viendo sus amos que había salido la esperanza de su ganancia, prendieron a Pablo y a Silas, y los trajeron al foro, ante las autoridades; 20 y presentándolos a los magistrados, dijeron: Estos hombres, siendo judíos, alborotan nuestra ciudad, 21 y enseñan costumbres que no nos es lícito recibir ni hacer, pues somos romanos. 22 Y se agolpó el pueblo contra ellos; y los magistrados, rasgándoles las ropas, ordenaron azotarles con varas. 23 Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. 24 El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo.

Un ejemplo mas acertado de un cristiano exitoso lo es el Apóstol Pablo quien en sus escritos nos dejó un gran legado de vivencia espiritual, pero muchas veces olvidamos que para ser exitoso en los caminos del Señor tenemos que ver las cosas espiritualmente donde se antepone el sacrificio, el trabajo y sobre todo la humildad. El apóstol, a pesar de todo lo que padeció tuvo éxito porque más adelante nos dice la palabra de Dios que hasta el carcelero con toda su familia se convirtió a Cristo, el trabajo de Pablo consistía en predicar el evangelio y que las personas se convirtieran al Señor, ese fúe su objetivo, ese fue su éxito. Nosotros tenemos un llamado, tenemos una comisión, llevar el mensaje del evangelio a las vidas que no le conocen, él hacerlo podría ser para unos cuesta arriba porque a veces hay que dejarlo todo sin esperar nada a cambio. Jesús dijo: en Marcos 10:21: Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: una cosa té falta anda vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoros en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. ¿Estamos dispuestos a seguirle? ¿Queremos ser exitosos en lo secular o en lo espiritual?

Un cristiano exitoso para mí es aquel que, anda y actúa en la perfecta voluntad de Dios y eso querido hermano el Espíritu Santo te lo mostrará.

El Exito

Escrito por Ubaldo Colon-Hernandez

En una encuesta que hice a un grupo de compañeros de trabajo sobre que significa para ellos el Éxito, obtuve las siguientes respuestas: El éxito para mí es lograr lo anhelado; poder terminar mis estudios universitarios; adquirir un mejor trabajo; tener dinero para gastar; triunfar en la vida. Para la gran mayoría de nosotros de una forma u otra esas respuestas podrían ser correctas. Y ¿porque no? la definición de la palabra éxito según el diccionario de la real academia española es: 1- Resultado feliz de un negocio, actuación, etc. 2- Buena aceptación que tiene alguien o algo. 3- Fin o terminación de un negocio o asunto.
Muchos cristianos podríamos actuar igual cuando pensamos en el éxito como una oportunidad de crecimiento. Soñamos tener o construir nuestras iglesias en catedrales y llenarlas de muchas personas, ver prosperar las iglesias con todos los adelantos tecnológicos para una mejor proyección del mensaje de la palabra de Dios y por supuesto un equipo bien sofisticado de sonido para que la adoración a Dios se escuche más agradable. Por supuesto un equipo que tenga tantos botones, aunque apenas se use el diez o el quince por ciento de ellos, pero de todos modos lucirá muy bien esa consola.
No quiero criticar para nada esos sueños, al contrario, desearía que todas las iglesias pudieran tenerlos. Pero por favor lean detenidamente este ejemplo: 11 Este relato fue narrado por el DR. Iván Álvarez Acosta, Psicólogo Clínico
A un hombre que pasaba por una ciudad sin muchas leyes favorables para él, se le acusó de alteración a la paz, se le acusaba también de engañar a los ciudadanos por los comentarios que decía y por quitarle el sustento a unos comerciantes. El hombre fue encarcelado y como no había mucha ley en el pueblo, los alguaciles lo torturaron pegándole en el rostro, azotándole y rasgándole toda la ropa en una forma despiadada. Luego fue llevado a la parte más obscura, mal oliente y tenebrosa de la cárcel. Esto, ¿ es éxito? Pienso que podría escandalizar a muchos con esta pregunta. Pero, la Biblia nos dice en Hechos de los Apóstoles capítulo 16.versículo 16-24: Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. 17 Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. 18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora. 19 Pero viendo sus amos que había salido la esperanza de su ganancia, prendieron a Pablo y a Silas, y los trajeron al foro, ante las autoridades; 20 y presentándolos a los magistrados, dijeron: Estos hombres, siendo judíos, alborotan nuestra ciudad, 21 y enseñan costumbres que no nos es lícito recibir ni hacer, pues somos romanos. 22 Y se agolpó el pueblo contra ellos; y los magistrados, rasgándoles las ropas, ordenaron azotarles con varas. 23 Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. 24 El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo.
Un ejemplo mas acertado de un cristiano exitoso lo es el Apóstol Pablo quien en sus escritos nos dejó un gran legado de vivencia espiritual, pero muchas veces olvidamos que para ser exitoso en los caminos del Señor tenemos que ver las cosas espiritualmente donde se antepone el sacrificio, el trabajo y sobre todo la humildad. El apóstol, a pesar de todo lo que padeció tuvo éxito porque más adelante nos dice la palabra de Dios que hasta el carcelero con toda su familia se convirtió a Cristo, el trabajo de Pablo consistía en predicar el evangelio y que las personas se convirtieran al Señor, ese fúe su objetivo, ese fue su éxito. Nosotros tenemos un llamado, tenemos una comisión, llevar el mensaje del evangelio a las vidas que no le conocen, él hacerlo podría ser para unos cuesta arriba porque a veces hay que dejarlo todo sin esperar nada a cambio. Jesús dijo: en Marcos 10:21: Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: una cosa té falta anda vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoros en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. ¿Estamos dispuestos a seguirle? ¿Queremos ser exitosos en lo secular o en lo espiritual?
Un cristiano exitoso para mí es aquel que, anda y actúa en la perfecta voluntad de Dios y eso querido hermano el Espíritu Santo te lo mostrará.