La Reforma Protestante en el Siglo 21

¿Qué significa La Reforma Protestante para el Siglo 21?
“La Sola Fe, La Sola Palabra, La Sola Gracia”
Pastor: Juan G. Feliciano
Texto: Juan 3:16

Todas las religiones del mundo tienen sus dioses: Jehová, Alá, Buda, Satanás, el Supremo Bien, el Ser Supremo, las deidades, los poderes, las potestades, etc.
Todas las religiones tienen sus Libros Sagrados: La Biblia, El Toráh, El Corán, El Libro Negro, el evangelio según el espiritismo, etc.
Todas las religiones se identifican con grandes nombres, profetas, escritores, sabios: Moisés, Mahoma, Jesús, Buda, los gurús, etc.
En todas las religiones se muestran “milagros” para demostrar su poder: adivinos, varas que se convierten en serpientes, revelaciones, profecías, “predicciones,” etc.
Todas las religiones tienen “seres especiales”: ángeles, querubines, serafines, espíritus, almas en pena, fantasmas, “santos,” etc.
Todas las religiones tienen sus teologías y filosofías que explican e interpretan sus “verdades”, sus doctrinas, sus dogmas, sus creencias, etc.
Todas las religiones tienen sus idiomas, sus argot, sus expresiones litúrgicas, sus ritos, ceremonias, cultos, servicios, prácticas, etc.
Todas las religiones tienen sus exégesis, sus intérpretes, sus cursos, sus institutos, sus seminarios, etc.
Todas las religiones tienen sus iglesias, sus sinagogas, sus mezquitas, sus lugares sagrados, sus ministros, sus religiosos, sus sacerdotes, sus monjes, sus gurús, sus pastores, sus monasterios, sus altares, sus capillas, sus monumentos, sus catedrales, etc.
Todas las religiones tienen textos preferidos, escritos que son citados por todos los seguidores, pensamientos útiles en momentos difíciles, sus textos de sabiduría, de conducta ética, etc.
Todas las religiones aspiran alcanzar la paz, el karma, el nirvana, la ansiada sensación de calma, de quietud, de solaz.
Todas las religiones tienen sus reglas de oro, sus cánones éticos y morales, sus códigos; por ejemplo: “ojo por ojo, diente por diente”, “no hagas a otros lo que no quieren te hagan a ti”, “dad a cada cual según su necesidad”, “el que la hace la paga”, “dar a los demás antes que pensar en uno mismo,” etc.
Todas las religiones llevan a sus fieles a practicar unas reglas de moralidad, de sexualidad aceptada, de oración, de ayuno, de reflexión, de meditación, de estudio, de relaciones sanas, etc.
Todas las religiones tienen sus canciones, sus himnos, sus alabanzas, sus rezos, sus oraciones, sus cánticos, su música especial, etc.
Todas las religiones desean que el ser humano crezca, que sea fuerte de carácter, que sea un ser humano desarrollado, de temperamento establecido y firme, que sea un ser humano de valores claros y creencias firmes.
Las religiones más conocidas: Judaísmo, Islam, Budismo, Cristianismo, las Mitologías (antiguas y modernas), el Hinduismo, las religiones indígenas, la Nueva Era, las religiones africanas (la santería,) etc.

¿Qué hace al CRISTIANISMO diferente?
¿El Antiguo Testamento, La Ley, El Nuevo Testamento, La Fe, La Gracia, El Bautismo, El Cielo, La Biblia?
Póngase a pensar…
Oiga lo que dice el Apóstol San Pablo: “Porque, primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que CRISTO murió por nuestros pecados, conforme a la Escrituras. Y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras, y que apareció a Pedro (Cefas), y después a los doce.” (1 Cor. 15:3-4).
Ahí está: Lo que hace diferente al Cristianismo de todas las demás religiones es LA CRUZ Y LA TUMBA VACIA. Jesús fue muerto, enterrado y resucitado. ¡EL REY QUE MUERE POR SUS HIJOS(AS)!
Sufrió por los que sufren, padeció por los perseguidos, llevó todas nuestras enfermedades, nuestras quitas, nuestros quebrantos, nuestras frustraciones, nuestras soledades, nuestros desengaños, nuestra desesperanza, nuestro desprecio, nuestra baja estima, nuestro dolor, nuestra muerte. ¿Es JESUCRISTO el Rey de tu vida?
Por eso San Pablo dice que “la palabra de la cruz es LOCURA a los que se pierden, pero para todo aquel que cree, es Poder de Dios”
Por eso llaman a Jesús, el Salvador. Dios hecho hombre, muriendo en una cruz por salvar a sus hijos e hijas.
Solo el Cristianismo posee un Salvador que puede perdonar pecados…desde una cruz. Por eso es que decimos que, no son los ritos, ni las ceremonias, ni las opiniones de un ser humano con un título especial, ni las tradiciones, ni los actos, ni las buenas obras, lo que salvan al ser humano. Es la fe en La Palabra Viva de DIOS y en Su Gracia la que puede salva a aun pecador. No es la “religión,” la que puede cambiar la vida del ser humano, sino la relación que el ser humano pueda establecer con DIOS, por medio de la fe, La Palabra y la Gracia. Por eso, La Reforma es tan importante hoy como lo fue hace siglos atrás. ¿Para qué adorar imágenes, celebrar ritos sin sentido, pagar por “indulgencias,” adorar personas, venerar imágenes de gente muerta, idolatrar religiones y personas?

Si la mayor necesidad del ser humano hubiese sido la economía, Dios hubiese enviado a un economista;
Si la mayor necesidad del ser humano hubiese sido la música, Dios hubiese enviado a un cantante;
Si la mayor necesidad del ser humano hubiese sido el entretenimiento, Dios hubiese enviado a un artista;
Si la mayor necesidad del ser humano hubiese sido la política, Dios hubiese enviado a un político;
Si la mayor necesidad del ser humano hubiese sido la tecnología, Dios hubiese enviado a un científico;
Pero la mayor necesidad del ser humano es el perdón de sus pecados y por eso Dios envió a un SALVADOR: ¡Jesucristo, el Señor!
“Para que todo aquel o aquella que en EL crea, no se pierda, mas tenga vida eterna” (S. Juan 3:16). ¡Amén!